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1.5 millones de millones de pesos en “irregularidades” fueron detectados por la Contraloría en solo un año.

 

Podemos imaginar, además, que la feroz doña Dorothy, a quien la “clase política” debe estar maldiciendo y analizando la forma de liquidarla, no detectó cada peso mal gastado y mal habido por los regentes del lupanar con vista al mar, por lo tanto, la cifra será sin duda alguna aun mayor, mucho mayor. Y en un solo año:  https://www.emol.com/noticias/Nacional/2025/06/20/1169933/contraloria-irregularidades-15billones-reparticiones-estado.html

 

No sé si utilicé bien la calculadora ya que son demasiado números, pero me da una cifra estimada de 80 lucas en “irregularidades” por cabeza, si consideramos 19 millones de habitantes en Barbarilandia, incluido el Tren de Aragua y los haitianos de la comandante Claudia. Así, al ojímetro nomás.

 

No está mal para ser solo lo que se ha detectado en un solo año de saqueo institucional. A eso agréguele lo que nunca se supo y el robo legal, digamos que el robo respaldado por papeles bien hechos. llegaríamos a una cifra nada de despreciable si consideramos que nos gobierna la familia Morales, puros dechados de virtud y amor al prójimo, expertos en manosear lo que le queda de cerebro a la horda de retrasados mentales que les creen y los votan ¿Entonces, por cuánto multiplicamos la cifra para acercarnos a la realidad?

 

Es desalentador corroborar día tras día las hazañas criminales del Merluzo y su banda de atorrantes y psicópatas, mientras se victimizan denunciando el acoso de la ultraderecha pinochetista y las desgracias del capitalismo cruel.

 

Estamos entonces, ante una farsa permanente, un espectáculo pirotécnico destinado a mentes rostizadas, una puesta en escena orientada a mantener una majamama farandulera permanente, un entretenimiento populachero, que no nos deja captar el verdadero fin de esta mafia organizada: El robo de todo lo robable.

 

Evidentemente que el comité creativo de la banda de malhechores nos intentará hacer creer que nadie en el gobierno y sus alrededores conocía las andanzas de los criminales que se han embuchado los millones de millones. Menos aun el Merluzo; menos aun el pelado psicópata aquel al que se le perdieron los computadores y la caja fuete; ni la pareja de ministro tortolitos, ni el par de yeguas embarazadas, una arrancada y la otra con más amigotes corruptos que Roberto Carlos, y menos aún todo ese zoológico de delincuentes que chilla, salta, gime, vomita, miente y delira en público para la delicia de los zombis que los siguen.

 

A continuación, y para echarle tierra a los robos desalmados, nos informaremos sobre los resquicios legales que, por medio de un abracadabra democrático, embustes delirantes y supuestos irracionales, los jueces también corruptos dejarán morir de inanición las acciones a seguir.

 

La Dorothy es la mala del cuento, nos dirán muy sueltos de cuerpo, mientras rebozan a la mala de la Dorothy con mentiras desquiciadas, calumnias infames, todo tipo de bellaquerias y supuestos diabólicos con los que intentarán destruir su carrera y su prestigio.  

 

La máquina propagandística corrupta que soporta el entramado delictual del gobierno ya debe estar urdiendo todo tipo de maquinaciones destinas a dejar atrás el “incidente”, y a convencer a sus zombis amaestrados que un futuro mejor nos espera, si contamos con más, más y más estado al cual saquear.