jueves, 17 de septiembre de 2020

18 PA´CALLAO

Como estamos en confianza luego de tantos años de innumerables e infructuosos intentos de salvar a la patria, les contaré algo muy delicado, pero por favor, que de aquí no salga. Últimamente anda mucha gentuza suelta, apuntando con su cochino dedo acusador.

 

Mañana celebraremos el “18”, aunque modestamente. La patrona compró unas empanadas de pino que dejó en el refrigerador, sin embargo aún no decido si las comeré o no, ya que podemos ser víctimas de un allanamiento y su respectiva revisión de aliento a cebolla. Ya saben, puede llegar algún inspector municipal o de salud, o algún carabinero que por supuesto no me recitará ningún decálogo de la risa, simplemente procederá a detenerme por flagrancia si me ve con la empanada en la mano.

 

Además contamos con un par de longanizas y un trozo de lomo liso, nada del otro mundo, y por supuesto desgrasado, en honor a doña Cecilia y su loca idea de salvarnos de nuestros pecados gastronómicos.

 

Busco en internet una manera delicada de cocinar la carne sin emitir señales de humo que pudieran delatarnos. Lo mejor será asarlo al horno con poco aceite y conectar la campana de la cocina. Y por si esta medida distractora no fuera suficiente, cerraré la puerta de la logia, correré la cortina del living que da a la terraza y procederé, silenciosamente, a cometer el arriesgado empeño. Digo yo, por si las moscas, uno nunca sabe por dónde mete la cola el patas de cabra.

 

El vino ya lo trasvasijé a una caja de leche con chocolate, pero no se preocupen, que la lavé muy bien antes de proceder. Y como yo soy vivo, o al menos intento serlo, me deshice de la botella del Undurraga entre gallos y medianoche. La oculté en una bolsa de basura negra y tiré el bulto por el tubo de la basura a las diez y media de la noche. El pasillo estaba vacío. No hay cuerpo del delito, no hay crimen, eso lo aprendí en las series del cable.

 

Este año no habrá chicha. Prefiero la que venden en el “Aravena”, una pica en El Monte que expende el brebaje en una botella de pisco reutilizada. Tampoco mote con huesillo del “Copihue”. No iré a centro por tan poco, además no están los tiempos para consumir productos crudos virtualmente contaminados con Coronavirus. Nada que pueda delatarnos ante la opinión pública, los agentes del estado, algún vecino colaboracionista y/o el móvil de Bienvenidos.

 

Ni hablar de ir a la playa. Nos cuentan las muchachas de consejería que algunos vecinos se han dejado caer luego del término de la cuarentena en Santiago, pero fueron desalojados por la PDI (y no es chiste).

 

Será un “18” poco tradicional, con mucho ojos vigilantes y operativos fiscalizadores tipo Stasi. Pero no importa, ya cambiaremos la constitución de Pinochet y dejaremos muy claro que el “18” es un derecho, de esos inalienables e irrenunciables, como los días feriados. Y ahí sí que no nos parará nadie ¡Salud! (pero que nadie se entere, ya lo saben, confío en ustedes). 

 

12 comentarios:

  1. Jajajajaja, viste alguna ventaja tiene vivir en el campo, no creo que los fiscalizadores lleguen por estos lados, asi que podré comer tranquilo, esta lista la carne, las empanadas y el vinito, faltará la chicha solamente, no tuve donde comprarla.
    Jajajajaja, si es otra buena propuesta para la nueva constitución, celebrar el 18 es un derecho y por ende se podrá celebrar a todo trapo sin limitaciones ni fiscalizadores que sin atribuciones legales allanarán mañana cuanto domicilio se les ocurra, pero bueno, pronto la nueva constitución solidaria nos hará libres Bien por la propuesta

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    1. Oí q los inspectores pueden golpear la puerta, y sin pacos ....... ya me veo cuantos patos malos con una tarjeta d inspector colgando del cogote llegará, no solo a comerse las empanás, sino q a cogotear a los enfiestados .....

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    2. Eso veo. Jjajaja, ahí no llegan inspectores, menos aun en estas fechas.
      Que tengas un buen 18, esperemos que el próximo año sea mejor.

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  2. ¡ Bien MAXIMO !...nos sigues haciendo reir en medio de la Pandemia Uno, el Plebiscito Dos, La Violencia Tres, y ahora con el tufometro y el fascismo sanitario. El humor nos salva en Barbarilandia.

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    1. No nos queda otra Andres, es reírse o enojarse. Que tengas un buen 18, y a aperrar a partir del lunes.

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  3. Gúena, Max !! ... con tu entrada se me alegró el almanaque, después d la bronca q me dió al ver en la tele al del plumero paraguayo en el mate, ese q es amigui del Shorty Paris y terrorista favorito d Tatán, q lo llevaron en avión con escoltas y guardaespaldas a su casa a celebrar el 18 en un nguillatún con empanás y tintolio, siendo q el weón es antichileno y nos quiere pitear a tóos ........ gracias x tu inyección d risa, remedio infalible ........

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    1. Otra vez el colega del ministro? Pues ya va siendo mucho digo yo. Ya le llegará su hora al machucao, que no las tendrá fácil siempre después de lo que hizo.
      Buen 18 estimado.

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  4. me gustaria ser vegetariano. La masacre de animales vivos para luego comerselos el 18 resulta espeluznante

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  5. Pero Máximo, como tan pocos recursos?
    Yo puse en la puerta lado a lado con la bandera chilena una bandera mapuche, con lo que me aseguro que no solo no me van a fiscalizar, sino que podré invitar como lo he hecho a cuanto pariente o amigo que se me pare la raja. Además también compre chicha que siempre termina dándome diarrea, pero ahí es cuando la banderita cumplirá du propósito final.
    Feliz 18 a todos los amigos de derecha y los que no lo son se pueden ir directamente a la cdsm.

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    1. Chicha/Diarrea según dicen que es por la mierda que le ponen para acelerar la fermentación o es una leyenda bucólica/urbana

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    2. Jjaajaj, así están los tiempos, no podemos comer mientras otros sufren. Este será un 18 políticamente correcto.
      Feliz 18 a ti también y que el próximo sea mas normal.

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