Este es el
verdadero problema que tenemos en Chile. No es la pobreza, cuyos índices son
abiertamente fraudulentos producto de esta informalidad en el trabajo; tampoco
es el sistema de pensiones, que acumula una rentabilidad anual promedio de UF +
8% desde su implementación; ni una supuesta desigualdad que tampoco puede ser
medida en estas condiciones, y que, por lo demas, no debiera ser un problema salvo
por envidia y resentimiento de grandes mayorías acostumbradas al fraude. https://www.emol.com/noticias/Economia/2022/08/30/1071395/informalidad.html
Si un tercio
de la población no paga cotizaciones previsionales y de salud, no hay solución posible.
Este es entonces el verdadero problema que la izquierda busca solucionar
(obviamente no lo solucionará), expropiando las cotizaciones previsionales y de
salud de quienes las pagan mensualmente.
A esto sumen
que casi nadie paga contribuciones de bienes raíces, ni impuestos personales,
ni colegio, ni universidad, ni consultas y tratamientos médicos, y si queremos
incluirlo, ni siquiera pagan el pasaje de la micro.
Ni hablar de
la competencia desleal contra quienes somos formales, pagamos patentes
municipales, contribuciones de bienes raíces, dividendos o arriendos, sueldos,
imposiciones, agua, luz, gas, gastos comunes, IVA del 19%, impuesto de primera categoría
del 27%, el global complementario que corresponde, y debemos cumplir con
exigencias ambientales, municipales, sanitarias y laborales, todo en medio de
una constante discriminación al empresario, mientras un fulano defrauda la ley
con el beneplácito de la autoridades instalándose en plena calle a vender en
negro lo que otro esta vendiendo con los costos antes descritos.
Ni hablar tampoco
de los trabajadores asalariados que verán como les roban una parte o la
totalidad de sus cotizaciones para poder entregar beneficios a quienes
pretenden participar del reparto pero no del ahorro.
Chile es un
fraude de principio a fin.