Políticos y
periodistas nos han entretenido mucho con la ola gigante que viene desde Rusia
a aplastarnos y ahogarnos. Seguramente la envía Putin, que como sabemos, es el
malo de la película (y nosotros somos los buenos, claro, porque somos demócratas,
y no enviamos olas mortíferas a ninguna parte, solo misiles y aviones
invisibles cargados de bombas).
El espectáculo
ha sido completo. Según me he enterado por la prensa seria, 1.5 millones de
habitantes de Barbarilandia fueron erradicados de zonas costeras. Se han
suspendido las clases en todas las ciudades que corren el riesgo de ser
barridas por las aguas, se suspendieron viajes en tren, al menos en Coquimbo y Concepción
no circulan buses en varias zonas de la ciudad, cabineros patrulla las playas en
busca de olas sospechosas, me imagino que millones de personas han trabajado
desde sus casas, y, tal vez, se ha acabado el arroz, el pan y el agua mineral
en algún supermercado de Viña del Mar o Antofagasta. Todo muy folclórico.
Los diarios electrónicos
nos advertían desde la madrugada sobre la hora exacta que la ola comunista llegaría
a nuestras costas democráticas y con perspectiva de género, seguramente para que
alcanzáramos a hacer nuestro testamento y rezar el último Padre Nuestro de
nuestras vidas.
En Isla de
Pascua la situación fue critica, el nivel del mar subió como 20 centímetros, lo
suficiente para cagarnos los zapatos de gamuza. En Valparaíso se ve que la cuestión
no fue mucho mejor, unos 15 centímetros de olas causaron el caos callejero, consultas
psicológicas de última hora y confesiones de malvadas vidas pasadas que aún nos
atormentan. Hay que dejar las cosas en orden antes de partir al infierno.
Aun no he
conocido las posturas oficiales de los candidatos presidenciales sobre el tsunami.
Quizá la Jara nos ofrezca un bono-ola; la Evelyn demande a la ola por
maleducada; Kaiser proponga encerrar a la ola en un campo de concentración para
olas en medio del desierto a la espera de su juicio sumario y posterior fusilamiento
al amanecer; y el bueno de JAK nos advierta que todo va bien, que el enemigo no
es la ola, y que calma y tiza.
Me quedo
tranquilo, en la Antártida los pingüinos y focas pueden zambullirse tranquilos,
se ha decretado el fin del “estado de precaución”. Las instituciones funcionan.
En la región
de Valparaíso, al menos hasta el momento en que escribo este boletín informativo,
se ha pasado del terrible estado de alerta al más vivible estado de precaución.
Ya llegará la calma y se abrirán las grandes alamedas porteñas.
El ahogamiento
masivo de chilenos tendrá que esperar, al menos hasta el próximo espectáculo televisado.
La ola de Putin no elevó el nivel del mar mas allá de lo que lo hace una marea
alta como la de toda la vida. Yo al menos he visto olas peores, aunque no tan
entretenidas como la rusa.
Ja,ja,ja,ja,ja, Don Máximo. ¡Qué imaginación tiene usted!
ResponderBorrarA veces... jaja
BorrarVoy a copiar un parrrafito que meti por ahi en otro contexto de tu blog, lo escribi tipo 14:00 cuando ya se conocia que la gente masiva y pasivamente aceptaba la expulsion de sus hogares o actividades "por su propia seguridad"
ResponderBorrar"Hay que fijarse en el medio ni escandalo con el sunami, y que la gente comun obedecio la orden de evcuacion, aun cuando el agua posiblemente suba 60 cms a 1,2 metros. Yo entiendo al tipo que tiene una pega de autoridad, si llegase a ahogarse alguien por no ordenar evacuacion lo crucificarian. Pero que gente comun sea tan pasiva me da una dosis de miedito de como reaccionaran cuando se lance la nueva intentona y el gobierno sea de nuevo pasivo como Piñera"
Si, ,lo hacen por eso, "por siaca" un jil se mete al agua, pero el show es delirante.
BorrarTambién me enteré, pero no me quedó muy claro si llegaron o no olas. Lo primero que pensé cuando supe del terremoto fue "ya deben haber wns diciendo que es culpa de EEUU y su arma secreta para mandar terremotos", no me equivoqué jaja.
ResponderBorrarEn este video japonés, en un laboratorio de experimentación se prueba la estabilidad de una persona con un tsunami de 30cm. Los japoneses saben de estas cosas.
https://www.youtube.com/watch?v=xNYrsH9XAT8
Arma secreta para mandar terremotos? jajaja no creo que sea para tanto.
BorrarPero el experimento es si a alguien lo pilla justo la ola poh, no quiere decir que van a suspender las clases y guardar las micros en la ciudad, o van a acumular arroz ... jaja
¡¡¡¡ felicitaciones MAXIMO, que pluma caudalosa.!!!
ResponderBorrarGracias Andrés
BorrarHoy te pasaste!
ResponderBorrarMe gustó el sarcasmo del dia de hoy.
En todo caso la zona de Kamchatka no ha dejado de temblar, por eso es mejor estar siempre en alerta.
Esa zona tambien fue conocida ya que ocurrió uno de los incidentes más graves de la Guerra Fría y que tuvo a las potencias al borde de irse a las manos: el incidente del KAL007
Gracias José,
BorrarY ese lugar queda muy lejos.
Olvidate de kamchatka y ponte a trabajar...inútil!!!
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