En el centro de Santiago, en calle Merced entre Estado y San
Antonio, en un local muy pequeño, de unos 2 o 3 metros de frente y no más de 10
o 12 metros de fondo, se instaló un chino con una sandwichería. Prepara unos
sándwich chinos, con carne, camarones, lechuga, unas salsas de algo, en un pan
medio alargado. Eso, mas una bebida, aparecen en la lista de precios en dos mil
pesos o un poco mas. Nunca he comido ahí, pero paso frente a su pequeño y
modesto local todos los días, y le he “sacado la foto”. El chino llega muy
temprano, solo, sin personal, se pone su uniforme de sandwichero con gorro y
todo, deja la cortina del local a medio subir, recibe a los proveedores, y
comienza a preparar la mercadería que utilizará a la hora de almuerzo. Corta
los panes; corta el tomate; prepara la lechuga; hace las salsas; descongela los
camarones, etc. ¿Qué yo soy copuchento?. Sí, en este caso sí, porque encuentro
genial al chino. Antes de la hora de almuerzo, llegan tres muchachas jóvenes,
que atienden, cobran, y lavan la loza. Mientras el chino cocina. Siempre que
paso por ahí, a distintas horas del día, el chino está cocinando, no se mueve
de su puesto, “trabaja como chino” el chinito. Su uniforme siempre está limpio,
trabaja a cabeza gacha, se nota que es perfeccionista. Sus clientes se lo
reconocen, ya que el local está repleto todo el día, y aunque el lugar es
pequeño, el chino se las ingenió para instalar solo mesones y así tener más
capacidad de atención. Conozco a varios chinos. Se que llegan a Chile como todo
inmigrante, con una mano adelante y la otra atrás. Seguramente algún pariente
que llegó unos años antes lo trajo, pero la plata del pasaje hay que
devolverla, para eso trabajó con él por casa, comida y algunos pesos que
ahorraba religiosamente. Tal vez el chino pasó dos o tres años trabajando y
ahorrando, trabajando y ahorrando, trabajando y ahorrando. Hasta que un día
cualquiera, pasó por Merced, vio el local en arriendo, le dio las gracias a su
pariente, y se independizó. Desde ese día, el chino sigue su rutina, trabaja
entre 12 a 16 horas diarias de lunes a sábado, gasta lo imprescindible, y
ahorra todo lo que puede. El chino llegará lejos, estoy seguro de eso.
Juanito tiene veinte años, vive con sus padres, la madre le
cocina y le lava la ropa, el padre le da unas lucas para la micro, pero Juanito
no paga en el Transantiago, él considera que el servicio es malo, que él tiene
derechos, y que no le pasará nada si sube por detrás, total, todos lo hace así.
Juanito estudia una carrera de mentira en una universidad de mentira, estudia
gratis porque según las encuestas se lo merece por ser pobre, usa el pantalón
hasta la mitad del poto, una mochila harapienta, un polerón con capucha, unas
zapatillas de marca pero destrozadas y sucias. Juanito no entra a clases ya que
considera que su profesor no tiene nada que enseñarle, y prefiere pasar al
boliche de la esquina a tomarse una cerveza de litro con la luca que le dio su
padre para pagar el pasaje que no pagó. Juanito piensa que la vida es injusta,
que el mundo no lo comprende, que hay gente que tiene cosas que él solo sueña
con poseer, que todo esto es culpa de los demás, del modelo, del capitalismo.
Juanito sigue a la Camila por Twitter, va a las protestas, tira piedras, ha
participado en la toma de su universidad. Así arreglará el mundo. Juanito está
esperando que llegue el sábado para poder descansar, ese día irá a una previa,
luego a la fiesta, y el domingo, que siempre es un mal día porque luego será
lunes, aprovechará a dormir hasta que su madre lo despierte para almorzar.
El próximo miércoles es 12. El chino se levantará temprano,
como todos los días, pero esta vez, antes de abrir su local, pasará al banco,
extenderá un cheque y pagara el IVA, para que Juanito pueda seguir su ritmo de
vida, al que tiene derecho solo por existir.
Maximo,
ResponderBorrarJunto con el chino, te puedo dar como ochorrocientos mil ejemplos mas de gente que, como tu y como yo, nos sacamos la mugre trabajando, generando empleo y pagando todas las multas que al primer buropelota remanente de la corruptacion (y sobran!) se le antoje cobrar... y lo que es peor, todos los impuestos que a cierto piñata se le ocurra crear, provisto que el partido así se lo ordene, compañero.
Apoyo 100% el Plan Ahora, y así lo he difundido lo mas que he podido, pero mientras mas lo pienso, y tus blogs han sido fuente de inspiración, cada vez me convenzo mas de que no es suficiente, falta hacer mucho mas si queremos ordenar el campo y que vuelva a producir.
En esa misma linea, no me había dado cuenta... si es miércoles 12, entonces es martes 11, cierto? Como cierto glorioso dia hace 39 años, donde por primera vez en la historia se le pego una sola patada al marxismo, y tuvimos, como alguien dijo, el privilegio de tener un gobierno sin politicos. Pero tambien fue dia martes otro 11, hace precisamente 11 años, cuando el mal, el terrorismo, volvió a levantar su fea cabeza en NY y otras partes. ¿Que pasará este martes 11? ¿Bien o mal?
Francisco. Y yo también te puedo agregar a varios más. Vamos con el plan ahora, ojala resulte y los traidores se asusten.
ResponderBorrarNo me había percatado del 11 de este mes, me conformo con que el día pase sin sobresaltos.
Lamentablemente ya se están organizando los encapuchados desgraciados, ya se están preparando los llamados observadores de ddhh, quienes son los sapos de los primeros.
BorrarSeguramente también les pagarán $35.000 para ir a atacar a los que asistan a alguna conmemoración como la vez anterior, este es su único día de trabajo.
Por eso, empezaremos con el Plan Ahora en estas municipales, para las presidenciales será un Plan Ahora 2.0 reloaded.
Máximo:
ResponderBorrarExcelente el post. Justo estaba escribiendo en el otro anterior, ojalá lo leas.
Porque crees que surgen la gente de Oriente? (no solo chinos). Por su esfuerzo y emprendimiento!!!! Cosa muy distinta de la cultura chilena que busca lo gratis y el menor esfuerzo.
Pero miralos cuando cobran por su trabajo o cuando quieren las cosas materiales, se vuelven todos unos capitalistas!!!!!!
Saludos.
Rodrigo. Por eso esta el dicho de "trabajan como chinos". Los de acá están preocupados de las zapatillas y el ipad.
ResponderBorrarMaximo, simplemente excelente, se lo hice llegar a un amigo que participa activamente en los blogs de El Mostrador y me pidió que te solicitare permiso para reproducirlo tal cual en un blog referente a utopías y rebeldías, que hoy aparece allí, ¿puede?
ResponderBorrarDesde ta te envía sus felicitaciones y agradecimientos, pues le viene como anillo al dedo a ese blog.
Saludos
Renato. Gracias. Y por supuesto, que lo publique nomás, y avísame en que blog de El Mostrador es par ver si alguno de los humanoides de allá se identifica con Juanito.
ResponderBorrarGracias, ya lo publicó, y te envía la dirección para que lo vean y participen también en EL Mostrador:
ResponderBorrarhttp://www.elmostrador.cl/opinion/2012/09/05/el-milagro-de-la-rebeldia-la-maravilla-de-la-utopia/
Gracias
Renato. Ya lo vi. Veremos que dicen estos gallos.
ResponderBorrarQue linda historia Máximo, la del chinito. Conozco mucho sobre los chinos por las historias de Perl Back y no se asemejan en nada a los chinos de ShanHai, Hong Kong o cualquiera de las pocas grandes ciudades de China. Este es un chino es un ejemplo para los jóvenes pero ellos o muchos de ellos están muy ocupados protestando, flojeando, simplemente siendo un lastre para nuestra socierdad.
ResponderBorrarYo suelo invernar en un pueblito costero. Alla hay un "chino" ... chileno pero igual que el Chino. Abrio hace unos 10 años un almacencito minimo, casi 3 mts de frente y un par de cajones con mercaderia en la vereda.A su lado un asi llamado Supermercado, en realidad, un almacen de pueblo.
ResponderBorrarLe adverti "al Chino" chilensis "....con ese vecino Ud va sonado".Replico "no se preocupe, ya vera"
Y vi.
El Chino chileno estaba abierto a toda hora mientras su vecino abria tarde y dormia siesta.
Todos nos acostumbramos a ir donde El Chino chileno porque a la hora que fuera estaba abierto.
Y el Supermercado cerro mientras nuestro Chino chilensis, con su señora y su hija detras del mostrador, tienen un excelente almacen.
Menos mal que su familia trabaja. Jamas le he visto un empleado
Nuestro Chino no es chino. Es un jubilado de Carabineros que opto por la libre empresa, en vez de rascarse el ombligo mirando TV.
Cuando yo hace muuucho tiempo abri mi primer boliche quiza trasferirlo, impecable, a cualquiera que quisiera hacerse cargo de el porque a mi no me daba el cuero para dos. No encontre a nadie...
Hay algo en nuestra mentalidad que esta muy bien descrita en el libro del sociologo Pablo Huneus "Nuestra mentalidad emprendedora". Aqui en Chile no calzan las ideologias sino se advierten las mentes que las van a manejar.
No es lo mismo el Estado en Berlin que el Estado en Uganda...o en sus niveles ingtermedios.
Ale. Así es. El chino trabaja y trabaja para costear los “lujos” de Juanito. El chino es verdadero, esta ahí en Merced, a Juanito lo inventé, pero hay miles y miles de Juanitos por todas partes, es cosa de ver la televisión.
ResponderBorrarAndrés. Hay muchos ejemplos como el del chino y el del carabinero jubilado. El problema es que se hacen pocos al lado de tanto y tanto Juanito.
Yo, por cosas de mi trabajo, conozco varios casos parecidos, son un ejemplo, pero no se difunde por los periodistas de izquierda, que solo promueven a los “pobres”, que al parecer venden mas. Después de todo, estamos en Chile. En USA gente como esta construyó ese país, y se les respeta. Es un problema de mentalidad.
que gueno tu comentario ,muy entretenido .
ResponderBorrarMaximo yo soy hijo de los baby boomers ,de la onda flower power y como cuando uno es joven solo vive la vida a como se vaya dando ,no recuerdo que haya habido tanta porqueria en la mente de los cabros, salvo los cabros que se las dieron de revolucionarios y que a muchos les costo la vida ,otros arrancaron y los demas aun vivos siguen dandoselas de "vivos" engrupiendo y robando en la politica chilena ......pero recuerdas tu esos tiempos ?? habia tanto veneno en el ambiente como lo hay ahora???
saludos
Laninita. Parece que yo soy un poco más “Nuevo”. No se si había tanto veneno en el ambiente, el problema es que ahora les aguantan todo, y no hay nadie que se atreva a decir lo contrario a lo que esta gente exige. Tienen el camino libre.
ResponderBorrarMaximo.
ResponderBorrarLo que dices acerca de los asiaticos, es verdad. Aca en Silicon Valley, hay una fuerte colonia asiatica tales como coreanos, vietnamitas y chinos. Estos son un gran aporte, principalmente las ultimas generaciones que se educaron aca. La mayoria de ellas, son profesionales de diferente indole, abogados, medicos, dentistas e ingenieros que son un motor muy importante para el estado de California. Lo mismo pasa con los indues que estan mas o menos en el mismo nivel que el resto de los asiaticos.
A Chile le hace falta esa filosofia de valorar al que trabaja duro y se supera en la vida a traves de su propio esfuerzo, no al que quiere conseguir todo gratis sin aportar absolutamente nada.
La politica, principalmente la de izquierda, han envenenado generaciones, haciendolas creer en quimeras irreales e imposibles de ser puestas en practica. La ignorancia ha sido el factor clave para concientizacion, por lo que la educacion para los izquerdistas es totalmente irrelevante dado de que solo a los ignorantes, se les puede amoldar mas a estas retrogradas e infames ideologias.
La fabula de el Chino y Juanito, deberia divulgarse en todos los medios.
Genial tu articulo Maximo.
Álvaro. Ya me imagino como es USA, los asiáticos y casi todo el resto. Allá se admira el esfuerzo, aquí en Chile se castiga. También es importante hacer notar que en Chile es mal mirado el trabajo manual, solo valen los títulos, que han reemplazado a los títulos nobiliarios de antaño. En USA es importante que se hace, aquí es importante que dice tal o cual papel. Esa es la gran diferencia cultural y económica.
ResponderBorrarProbando códigos html , gracias Máximo.
ResponderBorrarCONOZCA EL 'PLAN AHORA'