LA HORDA.

Estos sacos de weas ya no saben que más hacer. Ahora invaden el Metro, como si la gente que trabaja o estudia tuviera todo el tiempo del mundo para esperar a que estos vividores se cabreen. Esta mugre no respeta a nadie, son unos parásitos, una basura.

Un estudiante universitario de verdad, de esos que se queman las pestañas día a día, puede perder un ramo, y con ello un semestre, si no llega a un examen por culpa de la bazofia que tiene todo el maldito tiempo del mundo para perderlo y hacer que lo pierdan los demás. Personas de edad que apenas andan deben caminar a una o dos estaciones más para ingresar al Metro, solo si cuentan con suerte. Son una basura inhumana.

Todos se joden mirando como el mierdal disfruta causando problemas a los demás. Enfermos que pierden horas médicas. Personas que no llegan a una reunión importante. Trabajadores que vuelven cansados a su casa, y que pagan sus infames colegios ideológicos de mierda con sus impuestos, toda gente decente y normal, no como la horda analfabeta de sinvergüenzas que pierde el tiempo, total, piensan que algún día serán diputados de este lupanar con vista al mar, para lo que no se necesita educación, o al menos tendrán una peguita bien pagada donde no se trabaja, para lo cual tampoco se necesita educación, solo ser un parásito arrastrado dispuesto a robar y boicotear.

Y lo peor de todo. Carabineros no los pueden tocar o los dan de baja. El gobierno juega a indignarse y a colocar estúpidas querellas en contra de quienes resulten responsables. La Fiscalía archivará el show por falta de pruebas que nadie quiere aportar. Son todos unos cobardes y unos mal nacidos.