EQUILIBRIO

Hoy no sé sobre qué escribir ya que no veo novedades en Barbarilandia. Los impuestos siguen al alza; los indios continúan quemando a mansalva; veo a la izquierda intentando instalar una dictadura marxista por la vía electoral; y la derecha intentando parecer de izquierda; a los amarillos rechazando lo que ayer apoyaron; y la patrona hoy me retó dos veces, la primera por algo que no hice y la segunda por algo que no entiendo. Ha sido un fin de semana parejiiito…

 

Este domingo podremos confirmar en la encuesta semanal del asalariado de Sebastián, qué tan importante continúa siendo la comandante Claudia para el respetable público ¿Repuntará el apruebo? Yo me atrevería a apostar que sí, me aparece que la Claudia aun es grito y plata entre mujeres pobres de mediana y no tan mediana edad, esa señora esforzada que para la olla mientras copuchea con las vecinas sobre las nuevas prebendas que otorga la municipalidad.

 

Mientras tanto, la deuda pública continúa al alza, tal como la inflación; él ánimo de los inversores va a la baja y el mío los sigue de cerca. Pero no nos quejemos, ha sido una buena semana, ya que nos habíamos acostumbrado a que cada nueva noticia es peor que la anterior, y no hay nada más tranquilizador que un suave y continuo camino hacia la mediocridad, parejito y sin sobresaltos.

 

No he sabido sobre aumentos en portonazos y encerronas, lo que podríamos interpretar como que el mercado de este tipo de actividad económica se encuentra saturado, lo que nos lleva aun mercado estable. Los asesinatos callejeros de colombianos, venezolanos y colegas chilenos dedicados al narcotráfico tambien se encuentra estabilizado. Unos cadáveres por aquí, otros por allá, nada del otro mundo, al menos no estamos como en México, aquí la policía los encuentras enteritos, con cabeza y todo. Si alguno de ustedes escucha el rugir de una moto frente a su domicilio, agáchese por si acaso el sicario anda medio cufifo y mala puntería, luego se para y, sin asomarse por la ventana, puede continuar con sus actividades habituales.

 

Aún estoy pensando que pudo haber pasado que provocó el segundo reto del día de la patrona, pero da lo mismo, hoy ha sido un sábado placentero para lo que podemos pedir en estos días y lo voy a dejar así, total, ya pedí disculpas por lo que pudo a ver pasado y seguramente viendo la teleserie turca ya se le olvidó.

 

No hay como un buen sábado en un país estable. Y mas encimas nos quejamos…