A LLORAR A LA IGLESIA

Estoy emocionado esperando la celebración de los 50 años del golpe de estado. Creo que regalarán golosinas en las estaciones del Metro y los paraderos de micros. Los encargados de entregar los chicles, calugas y gomitas de naranja serán los cabros de la fundación “vivo septiembre”, que al parecer está dirigida por el cuñado de la hermana de la polola de Jackson, junto a los creadores del desayuno de la iñora esa ¿La recuerdan?

 

Junto a la entrega de dulces para el personal, organizarán conversatorios; se instalarán también mesas de trabajo; mesas de dialogo y todo el tipo de mesas que hagan falta, que no se note pobreza.

 

Propongo que un grupo de expertos, cada uno de ellos nacido y criado en alguna universidad de la plaza, nos haga ver la realidad que se vivía en aquella época, como, por ejemplo, la felicidad reinante, el ánimo generalizado en la población, la educación a todo trapo, y unas JAP repletas de todo tipo delicatessen, al mas puro estilo Jumbo pero gratis. Y justo ahí…, aparecen cuatro milicos dispuestos a aguarnos la fiesta ¿Por qué nunca nos dejan ser felices?

 

Según la historia oficial, los muertos (los suyos) fueron todos unos santos inocentes. No mataban, no robaban, no pretendían esclavizarnos por nuestro propio bien y nuestra anhelada felicidad. Los milicos, por supuesto, buscaban hacer mas pobres a los pobres y mas ricos a los ricos. Buen discurso diseñado para los imbéciles de siempre.

 

A mi no me interesan las razones que se invocaron para actuar el 11. No me interesan las explicaciones de la izquierda. A mi solo me interesa que se hizo lo que había que hacer, se hizo bien, rápido, bastante limpio comparado con otros aseos generales en el planeta, y a llorar a la Iglesia.

 

El último pajeo mental es: ¿fue Pinochet presidente? Pobres tipos seudo intelectuales, dan pena ¿Es necesario hacer el imbécil para parar la olla? Digan lo que quieran, lo cierto es que ganamos ¿O aun no se dan cuanta? Ratas infectas, si pueden robar todo lo que roban a diario es porque el “modelo” funciona.

 

¡¡Que viva el 11!!