EL QUIOSCO DEL "NO".

Ayer no pude escribir ya que la empresa de mentira MoviStar tenía no se que problema con la fibra óptica, la grabadora me tuvo para el hueveo, nadie me explicó nada, supongo que la cuenta me la cobrarán igual, y si me gusta bien y si no me gusta mala suerte nomás. ¿Y donde están Longueira y Peribonio?. Supongo que revisando baños en algún mall.

La esquina de Ahumada con Huérfanos, ha sido ocupada desde que recuerdo para todo tipo de recolección de firmas. El 99% de las veces para intereses de izquierda. MEO, Greenpeace, sindicatos defendiendo su parcela, todo tipo de organizaciones y ONGs que supuestamente defienden indios con zapatillas Nike, homosexuales, mujeres, niños, ancianos, trabajadores que no trabajan, profesores que no enseñan, estudiantes que no estudian, comunistas con tarjeta de crédito, idealistas varios, y todo lo que ustedes se puedan imaginar y por supuesto lo que ni se imaginan, sobre todo de esto último.

Hoy instalaron dos quioscos, uno del gobierno, atendido por un grupo de abogados (supongo), seguramente egresados de una Universidad de mentira, que tal vez lucra descaradamente en lugar de entregar una educación pública, gratuita y de calidad, tal como propone el partido comunista, el que aun está al debe en crear el paraíso en la tierra, aunque no pierden la esperanza de lograrlo.

Los abogados de juguete tenían un lienzo con publicidad del gobierno de excelencia 24/7 que ofrecía asesoría gratuita, me imagino que para el pueblo. En la cola esperaban unas diez personas.

El otro quiosco, atendido por dos tipos con una pinta de comunachos que no se la podían, tenía cuatro lienzos. Uno le decía NO a las AFP, el segundo le decía NO a las represas de Aysén, el tercero le decía NO a las estafas del retail, y el cuarto le decía NO a la explotación de Litio. Era el quiosco del NO a todo, salvo, por supuesto, al paraíso en la tierra que seguramente querrán formar sin jubilaciones, sin electricidad, sin supermercados, sin minería, pero con bastante publicidad televisiva dirigida por periodistas de izquierda.

Ahí estaban el par de comunistas, recolectando firmas para negarse a todo, impedir todo y reclamar por todo. La gente se acercaba, varios firmaban, recibían una explicación express sobre las bondades de la negación masiva a la que se adherían, y seguían su camino, tal vez con la convicción de haber contribuido al desmantelamiento del modelo neoliberal que oprime a las clases mas desposeídas de la sociedad, y a la instalación de la primera piedra del nuevo modelo que no tienen idea como será, ni tienen interés en averiguar sobre sus “bondades”.

Me detuve a mirar a los rojelios, y por un momento pensé en la reacción que tendrían si me acercaba a preguntar sobre la posibilidad de firmar para decirle SI a algo, aunque sea a una cosa poca, de inmediato desistí, pensé que podía incentivarlos a abrir una sucursal justo al lado, esta vez sería el quiosco del SI. SI a la nacionalización del cobre, SI al cambio del binominal, SI a la asamblea constituyente, SI a las elecciones con voto a mano alzada y un grupo de flaytes con banderas rojas y cara de odio mirándote por encima del hombre. Me arrepentí de inmediato, seguí mi camino, los pobladores continuaban esperando la asesoría de los abogados de juguete, la gente seguía firmando para decir No a todo, y yo no podía creer que siguiera ahí parado perdiendo el tiempo.