VAMOS MAL, MAŇANA PEOR.

El gobierno es un chiste. Ahora nos anuncian que no creceremos al 3,6% como “ellos” y nadie más lo tenía previsto, sino que al 2,5%. Esto significa que nadie sabe cuánto creceremos durante este año, solo sabemos que no será al 2,5%, sino a menos que eso.

Ya aparecen voces que anuncian una modificación a la extraordinaria y sin igual reforma tributaria ideada por el cerebro de Jorrat y otros próceres recolectados por Peñailillo quizá de donde, esa que nos acercaría a la igualdad. No sabemos si la modificarán para robarnos más, para robarnos menos (no lo creo), o para robarle a unos (los que no hacen lobby) en lugar de los otros (los que hacen lobby). El compañero Andrónico puede estar tranquilo.

Otras voces, o tal vez las mismas, ya reniegan de la reforma constitucional que anunció la Claudia para sacar del foco a Rapiñίn y su mujer. Según estas voces, la reforma constitucional, esa que pretende modificar la frase “lo suyo es suyo” por la que dirá “lo suyo ya no es suyo”, está espantando la inversión y tiene la confianza de Barbarilandia por los suelos. Entonces, proponen postergarla “por algún tiempo”, es decir, nos van a meter la mano en el bolsillo, pero aún no.

Así piensan revertir la situación los señores políticos, con verdades a medias, mentiras a medio decir, cambios de último momento, revisiones a la carrera y postergando el día en que nos piensan meter la última puñalada. Les va a ir mal, eso lo sabemos todos, pero ellos intentan aguantar mientras se pueda y postergar el final.

Y como los empresarios son “lesos” (esa palabra que esta tan de moda), van a seguir invirtiendo igual. JA. Son para la risa estos gallos.