La confusión
arrecia. No es bueno confundirse. No es lo mismo esto que lo otro. No, no es lo
mismo, aunque lo parezca, porque los intereses nos son iguales ¿Quién gana y quién
pierde? ¿Qué pasa si seguimos el rastro del dinero? ¿Qué se pretende probar? ¿A
quién se quiere impresionar?
Existen los
abusos, el negocio de los abusos, los abusos de verdad y los ficticios. Los que
promueve la prensa, los que utilizan los políticos, los que se cambian por
plata. No todo es igual, aunque a algunos les parezca y eso los confunda.
Existen los
abusos falsos, esos donde el director de la teleserie invita a la inocente
Dulcinea a un “casting” en su departamento. Y ella va corriendo y hace lo que
hay que hacer en este caso. Ya conocen las tres frases célebres de los aspirantes
a triunfadores: “hay que creerse el cuento”, “hay que estar ahí”, “hay que
saber venderse”. Y luego no obtiene el papel protagónico. Y luego se da cuenta
que la violaron ¡Yo te creo hermana!, chillan las feminazis.
Existen los
violadores que aparecen de la nada y abusan de una chiquilla que regresa de la
pega. La cabra recorre nueve cuadras desde el paradero hasta su casa, en la población
regentada por narcos y cogoteros. Eso es una violación, pero no aparece en
ninguna parte, no es negocio para la prensa, no es tema para los políticos, el
violador puede ser un “poblador”. Tal vez un colombiano o algún ecuatoriano.
Nadie se interesa en ventilar esas cosas. Eso no existe.
Existen esas
cosas raras. La fiesta de madrugada, trago a granel, drogas de moda. Y vamos
dándole. Y sigamos dándole. Ella como que quiere y no quiere. Al otro día se arrepiente
¡Me violaron, nunca dije que sí! ¡Yo te creo hermana!, chillan las feminazis. El
pobre gil debe probar que le dijeron que sí, ¡porque no es no, y no negarse no
es sí!, a las cuatro de la mañana, caramboleados. Je…je…je… ¿Eso es violación?
Existen los
abusos a menores de edad que asisten, obligados, al colegio que sus padres
escogieron para que “arme redes”. Paseos y retiros a lo menos extraños.
Piscinazos en pelotas, fotos mediante. Tradiciones de décadas. Todos lo saben,
al menos lo sospechan, pero nadie habla ¿Será el precio a pagar por mantener o
subir en la escala social? Los curitas vienen y van, pero nadie sospecha. Nadie
sospecha. Nadie sospecha.
Existen casos
donde todo depende de quién abusa. Si es Opus o Legionario amerita un show
nacional con fuegos de artificio. Si es Jesuita nadie sabe nada. La tele no se
entera. La justicia menos. Las víctimas no son víctimas porque los victimarios
son santos o aspirantes a serlo. Hasta que todo se sabe. La avalancha no la
contiene nadie. Ahí aparecen los que no sabían, los que fueron engañados, los
que confiaron de puro inocentes que son. Los que piden perdón. Los que
crucifican al culpable que ya no está, al culpable que no se puede defender
¿Habrán leído la Biblia alguna vez?
Existen los malévolos,
esas autoridades morales auto coronadas. Los que poseen una red de
encubrimiento política y periodística. Esos que se creen intocables. Son los
peores. Son la verdadera mafia. Esos ven la paja en el ojo ajeno y no la viga
en el propio (Lucas 6:41) (Mateo 7: 3-5) Ya los conocemos.
Y hay más, muchos casos mas. Así
que no se confundan. No necesitamos tantas pruebas, esas son para el juez. Basta
con haber vivido, con conocer al ser humano, que abusa cuando puede, se
aprovecha cuando lo dejan y se vende si cree que le conviene.
Estudié en un colegio católico y no pasé por las "atrocidades" que acusaron durante años los "jesuitas". Conocí a varios que "nos contaban" que acogieron a cuanto "oprimido por la dictadura más sangrienta de todos los tiempos" y que tiempo después fueron traicionados por ellos mismos.
ResponderBorrarLos jesuitas, al aliarse con los zurdos, creyeron sentirse "a salvo" de la amenaza zurda, pero ahora se dieron cuenta que se convirtieron en sus tontos útiles.
Ahora acusan al Padre Hurtado a raíz de lo acaecido con Renato Poblete "solo por haber sabido".
Obvio, ¿por què no Hurtado,si están retirando estatuas de Cristobal Colón?
BorrarEs justo que a esta gentuza también le llegue su hora ¿Verdad que sí?
Hace falta lo siguiente:
Borrar- Una purga
- Una noche de cuchillos largos
- Una expulsión de los Jesuitas 2.0 y sin retorno
¿por qué todo eso? Si tu no concuerdas con mi opinión, para ti esto es parte de una moda de acusaciones falsas y las denunciantes no te ofrecen credibilidad.
BorrarEfectivamente, recuerden que "sin pruebas" no hay acusación.
Borrareste clima enrarecido que caudalosamente describe MAXIMO es lo que me provoca reacciones encontradas en el Caso Poblete.
ResponderBorrarAntes del Informe Jesuita ya Tatan había echado abajo la estatua de Poblete.
El mismo Informe es medieval.Casi no hay testigos.(y si los hay pa callado) Las victimas están ocultas.No hay nada, ni encubrimiento en 48 años, ni violadores patoteros,solo una sola denunciante con cara de loca y solo un culpable el Muerto.
Ahora van por el Padre Hurtado Deberian ir también por el Papa argentino que armo el despelote. O por Cristo, ya que nadie se salva.
Entonces uno ya no esta de acuerdo ni con uno mismo.....si quieres ser feliz, como dices, no analices, no analices
No me sorprende, se condena sin enjuiciar, sin pruebas ni nada. Dejamos que los millenials gobiernen a los pendeviejos solo por miedo.
BorrarAndres, es siemple, a estos tipos tambien les llegó su hora. Y es muy simple, los jesuitas son una mafia macabra. Convéncete hombre, lo que se dice es verdad, no pudieron continuar ocultándolo, fue una avalancha que prepararon para los demás y se los llevó a ellos.
Borrara cada pavo le llega su dia de acción de gracias... y a estos les pasó precisamente por pavos!
BorrarGenial comentario, Máximo ........ x imperdible, ya se lo envié a mis cientoytantos contactos, d tóas las layas ...........
ResponderBorrarGracias raulacho
BorrarLean la columna de hoy, de Francisco José Covarrubias, en El Mercurio, con quien no me une casi nada, pensamos muy distinto.
ResponderBorrarHoy no da una opinión, solo relata hechos indesmentibles. No podemos mas que concordar con él.