"DESCONOCIDOS".

“Desconocidos” continúan incendiando el centro de Santiago, Plaza Italia, La Araucanía y todo aquel lugar que sea posible quemar, destruir y saquear. Carabineros mira desde lejos los atentados, mientras el gobierno ruega para que no se acerquen al lugar de los hechos. ¡Qué cosas con estos “desconocidos”! Nunca vi en mi vida tantos desconocidos actuando durante tanto tiempo sin que nadie los reconozca. Yo creo que el gobierno nos está haciendo la desconocida.

 

En el fondo comprendo al gobierno que no gobierna ni reconoce a nadie. Imagínense una razia contra algún grupo no-terrorista en La Araucanía, con una docena o más de prisioneros de guerra. El gobierno corre el riesgo de sacarles las capuchas y encontrarse con la ingrata sorpresa de mapuches blancos hablando francés y euskera, otros morenitos provenientes de Colombia y Venezuela, algún médico cubano, un par de traficantes de cocaina y un trio de niñitos blanquitos ex alumnos de algún colegio jesuita con sentimiento de culpa y experimentados clavadores de tablas.

 

En realidad nadie quiere que algo así suceda, tiraría por el suelo toda la teoría sobre la rebelión justa y reivindicativa, y pondría sobre la mesa el verdadero contexto de la revolución. Bueno, siempre y cuando los compañeros de la prensa seria lo divulguen, algo por lo que apostaría ni una luca.

 

Queda para el análisis de cada uno de los lectores de estas conspiranoicas líneas contrarrevolucionarias, analizar si el gobierno que no gobierna es víctima de las circunstancias y su miedo parido, cómplice de la revolución, Estado vasallo de la ONU, o un simple observador de los hechos mientras espera el fin de su nefasto gobierno. Muchas veces todo es demasiado complicado y son demasiados los intereses comprometidos, por lo tanto quizá sea un poco de todo lo anterior. Tal vez podríamos definir a este gobierno como cómplice pasivo de la revolución.