HONORABLES ATORRANTES

Sin considerar las ideas políticas de cada postulante, el único candidato decente y preparado es JAK. Ya he definido al niñito del techo, para que insistir. La vieja chica evidentemente vale callampa; si la comandante Claudia no tenía las mínimas condiciones para gobernar, esta menos aun; no tiene idea de nada, es ignorante, resentida y mentirosa; la vieja no existe.

 

Que puedo revelar de Boric a estas alturas. El fulano no es capaz de titularse; nunca trabajó ni dio trabajo; nunca invirtió; nunca pagó IVA; ha vivido del dinero de quienes lo colocaron donde está (porque alguien lo financió desde el inicio, obviamente, y sabemos quiénes fueron); y ahora vive de los contribuyentes, mientras pretende reconstruir el país sin saber ganarse la vida por su cuenta.

 

El MEO es la podredumbre personificada, tambien lo he masacrado por este medio varias veces. No trabaja, es corrupto, mentiroso, oportunista, frívolo, es el niño de los mandados de intereses internacionales, en fin, una alimaña de albañal. Parisi siempre ha sido un chamullento, una cara de raja. Artés es un psicópata ¡Y quedaron fuera el doctor File y Lorenzini! Jajajaja. ¡Ufff!, que terrible.

 

¿Cómo hemos llegado a este nivel? Yo creo sinceramente que siempre hemos tenido este nivel, aunque no se notaba. 17 años de dictablanda; justo cae el muero de Berlín; senadores designados y demas circunstancias mantuvieron las garras fuera del cajón, o al menos no demasiado adentro. El crecimiento económico producto del “modelo heredado de la dictadura” y la repartija controlaron las pasiones hasta cierto punto. Pero no podía durar para siempre. Ya saben, Michimalonco y compañía aparecerían más temprano que tarde.

 

Ya lo he mencionado varias veces, yo desconfío tremendamente de la mayoría de los chilenos porque los conozco. Se que la gallá vale callampa, es tramposa, mediocre, mentirosa, vaga, fresca y ladrona ¡Es que es verdad!

 

Entonces es lógico que tengamos estos candidatos, ya que representan fielmente a los electores, de no ser así, los partidos colocarían a otros mejores, pero los mejores no tienen cabida entre tanta mala onda, tanta envidia, tanto resentimiento y tanto rasquerío. Díganme lo que quieran, pero se que tengo la razón ¡Es que no veo otra explicación! ¿Ustedes sí?