A veces la vida nos pone frente a situaciones que nos llevan a una crisis existencial que parece insoluble. Me siento deprimido, agobiado, no veo salida a mi problema. No es nuevo.
“Ser o no
ser, esa es la cuestión: si es más noble para la mente sufrir las hondas y las
flechas de una fortuna escandalosa, o tomar las armas contra un mar de
tribulaciones, y oponiéndolas, acabar con ellas: morir”, exclamaba Hamlet.
O el gran Segismundo,
quien al no comprender los devenires de su pobre vida nos advierte: “Sólo
quisiera saber para apurar mis desvelos —dejando a una parte, cielos, el delito
del nacer—, ¿qué más os pude ofender, para castigarme más? ¿No nacieron los
demás? Pues si los demás nacieron, ¿qué privilegios tuvieron que yo no gocé
jamás?”
He visitado
a mi gran amigo Federico en busca de algo de fuerza que me permita mantener la templanza
necesaria en estos días de desasosiego. Solo una sólida voluntad de poder me
permitirá mantener la cordura y avanzar. No ha sido suficiente.
La próxima
semana es el cumpleaños del cabro chico. Me informa que solamente invitará a
sus amigotes cavernícolas del equipo de futbol que terminan en inspectoría luego
de cada recreo. Machirulos heteropatriarcales puros.
-¿Invitarás
a alguna de las niñas?
-No, a
ninguna, son muy metidas y siempre quieren mandar
-Debes
considerar que el cumpleaños debe contar con alguna cuota de género, de
preferencia paridad total. Debemos encontrar la solucionática a la problemática.
-No, porque
son muy malas para la pelota.
Y eso no es
todo. Lamentablemente el curso del cabro chico no cuenta con su cuota de negros
¿Qué hago? ¿Un cumpleaños sin niñas ni negros? No puede ser. El otro día divisé
en el ascensor a unos nuevos vecinos en el edificio, se que no son haitianos, deben
ser colombianos o venezolanos (siempre confundo el acento de ambos, salvo el de
una colombiana paisa)
- ¿Por qué no
te haces amigo del niñito del octavo piso?
- ¿Juega al fútbol?
- Supongo
que debe jugar.
-Mmmmm… No
se.
¿Creen que
eso es todo? No. No sabía que tampoco cuento con compañeros aborígenes,
seguramente porque he tenido la suerte de no ir a reuniones hace dos años
gracias al Covid 19. Me perdí los cafecitos, el queque, la botella de Bilz y
los vasos plásticos, el resumen de la tesorera del curso, el rezo de
bienvenida, la recolección de los kilos de azúcar y las cajas de té, y los
discursos sobre la paridad, la integración y otras disquisiciones de esta vida
moderna.
Adelantándome
a los hechos, ya había delimitado un sector del patio para el compañerito
aborigen que ahora se no existe, de tal modo que pueda celebrar el cumpleaños de
acuerdo con su cultura ancestral sin interferencias del mundo exterior. Medí un
cuadrado de 3 x 3, lo cerré con cinta amarilla e incluí un macetero con
copihues, una bandejita de piñones y un letrero que dice “prohibido encender fuego”.
Que conste que no es una discriminación, sino un requisito del condominio.
¿Y eso es
todo, pensarán ustedes? Nica. Necesito un compañere, es decir, un excompañero que
ahora sea compañera o viceversa. No puedo hacer un cumpleaños a tontas y a locas
sin un protocolo de integración de género. Cada vez que pienso en el cumpleaños,
mis problemas aumentan. Estoy desesperado.
¿Ahí termina
mi problema? ¡Ojalá! Para terminar de cagarla, en nuestro curso no contamos con
Nicolás ni con sus dos papás ¿Y ahora, que hago? No puedo aceptar que lleguen papás
y más como si nada hubiese cambiado en el mundo en estos últimos diez o quince
años. Yo quiero un cumpleaños como Dios manda, o mas bien, como la llamada
agenda globalista manda. El asunto es que esto no parece funcionar y no veo la
manera de cumplir con la normativa vigente.
En
consecuencia, tengo los globos, las cornetas, el pan, las vienesas (los cuicos
le dicen salchichas), el tomate y la palta. Mañana compro bebidas, jugos,
mayonesa, kétchup y papas fritas. El último día compro la torta. Para los papás
te, café y algunos sanguchitos de alguna mierda. Pero no es suficiente ¡Ahora
me acordé! Necesito comprar comida vegana y alguna kosher por si aparece algún judío.
Aun me
faltan: Tres niñas, una de ellas transexual; un haitiano; un mapuche; una
pareja lesbiana; una binaria, un lugar para estacionar bicicletas, otro para
dejar perros y construir una rampa por si alguien aparece con la bisabuela en silla
de ruedas.
Esto de
hacer cumpleaños es un delirio. El próximo año le ofreceré al cabro chico cien
lucas a cambio de no hacer nada. Seguro acepta y me libero de esta angustia que
me esta matando. Esto no es justo.
tienes que advertirle "si sigues cumpliendo años te vas a morir" y ahi mismo se le acaba la mala costumbre de celebrar cumpleaños
ResponderBorrarYo por el momento aun no me repongo de una cuenta de la Cia de Luz que por una casa en la playa, deshabitada, me cobra $196.700 por febrero, marzo y abril, ----meses que yo los pague religiosamente por Servipag, sin exceder las 2 lucas mensuales cobradas por ellos mismos via Servipag.-------
Es decir, via Servipag me cobran menos de 5 lucas trimestrales y via e mail me cobran $196.700.
Creo que los chinos operan ahora esa Cia. Debe ser el sindrome de Shangai, todos encerrados en sus casas.
Eso de los cobros es un desastre, pero puedes apelar. Tienes que tener la lectura del medidor, a veces cobran un estimado si es que no pueden ver el medidor.
BorrarUno veía esas películas cómicas de los años 90 y salen todas las situaciones descritas por Máximo.
ResponderBorrarModernidad o agenda el tema es que nos alcanzó. Se demoró sus tres décadas en llegar a nuestro país en vías de deconstrucción.
Todo es una locura. Ya no da ni para reirse.
BorrarChuta!! Que quieres que te diga.
ResponderBorrarPor 100 lucas ahorrarse todo el cacho, es un regalo. No lo pensaría ni un minuto.
Eso mismomdigo yo... Jjajaja
BorrarDe seguro la colombiana tiene un "acento' que la diferencia notoriamente de las demás.
ResponderBorrarY otras cosas también las diferencian. Pero no lo comentes, eso no se hace.
BorrarHoy lunes, diversos puntos de la ruta 160, de la provincia de Arauco están tomados por camioneros forestales. Cero noticias en emol, lun y la tercera.
ResponderBorrarO paran todos y lo hacen indefinidamente, o hacen el loco porque nadie los pesca y terminaran en la cárcel.
BorrarInvita a algún progre del blog y cumples todas las cuotas. Lo metes en una jaula y consigues una pareja de carabineros por siaca.
ResponderBorrarJajaja. Parece ser una buena idea, pero corro el riesgo de que rompan los barrotes y los pacos se arranquen. Mejor pago las cien lucas y me ahorro hacer los completos.
BorrarEl weonaje progre tiene del año pidan.
ResponderBorrarY se vanaglorian de eso.
BorrarContinuando con mi comentario, tanto que lloraban por la discriminacion, el rechazo, los privilegios y terminaron creando más discriminación (cuotas de genero), rechazo (a quien no piense igual como piensan estos sacoweas), privilegios (escaños reservados, la misma wea de las cuotas de género, la tómbola que es una forma de discriminar), etc.
Borrarson autoproclamados weones congénitos.