¡A QUEMAR, A QUEMAR, QUE CHILE SE VA A ACABAR!

Me imagino que esta vez no será distinto. Nadie resultará responsable por los incendios, ya que a nadie con alguna autoridad le interesa dar con los responsables. Si el gobierno de turno es de derecha, será por miedo a un lio monumental, huelgas de hambre y amenazas de todo tipo; si el gobierno de turno es de izquierda, será por complicidad con la causa y el miedo a capturar a gente que “sabe demasiado”.

 

Una vez apagado el incendio y de paso el escándalo (tal vez el festival de Viña del Mar y el rebuscado envenenamiento del moribundo Pablo Neruda ayuden), vendrá la reconstrucción, la mayor parte de ella a costa de los propietarios siniestrados, y una pequeña parte a costa de contribuyentes aburridos de pagar por las desgracias provocadas por compañeros combatientes y reivindicadores sociales.

 

El techo y demás organizaciones buenistas estarán en su salsa. Cabritos recoge escombros y reparte paquetes de tallarines, viajarán en ánimo de tour social a la zona sacrificio -porque de eso se trata, ¿verdad?-, alguien debe sacrificarse por la causa en busca de su salvación por medio obras benéficas. Cánticos y guitarreos playeros alrededor de una fogata (¿o eso ya no está de moda?); pololeos de verano y una santa historia que contar a su regreso al “sector oriente de la capital” amenizarán la entrega a Cristo ¿Qué sería de los buenos de este perro mundo sin tanta miseria, tanta desgracia, tanto falso turista, tanto pobre a quien decirle cómo debe vivir y tanto lavado cerebral de pobres aves?

 

¿Para qué necesitamos cortafuegos? Siempre será más bacán recoger palos quemados ¿Para qué construir como la gente? Siempre será mas cristiano promover campamentos de pobres necesitados ¿Qué es eso de encarcelar a criminales? ¡No!, algo habrá echo el capitalismo para nublar la mente de estos buenos salvajes.

 

¡El cambio climático es el responsable de los incendios! ¿Y quien es responsable del cambio climático? ¡El capitalismo y el hombre blanco heteropatriarcal! Pues entonces… ¡Abajo el capitalismo! ¡Abajo el patriarcado! ¡Abajo el imperialismo! ¡Abajo la economía extractivista! Chile merece un futuro mejor, dirigido por los mismos que hoy queman bosques y pueblos de quienes muy mayoritariamente votaron en contra de su criminal y ladrón proyecto político que no pasa de ser un proyecto mafioso.

 

¡Exijo una explicación!, nos advertía Condorito: ¿Cuántas comunidades indígenas violentas fueron arrasadas por este incendio, o por el anterior incendio, o por el anterior a al anterior incendio? Supongo que ni los compañeros de la prensa seria, ni los expertos escribidores de papers, ni los señores políticos, ni los curas rojos promueve desgracias, nos informará al respecto, porque, ¿y si no se ha quemado ninguna? ¡Ufff!

 

Pero a no desfallecer, compañeros, tal vez se nos ha presentado la oportunidad de subir los impuestos para crear la agencia nacional de hidrocarburos; el ministerio de los incendios; un impuesto específico a botellas de vidrio, envases de plástico y cualquier otro elemento sospechoso de portar bencina; y la prohibición de utilizar fósforos y encendedores en días de calor ¿Y si obligamos a la gente decente a solicitar salvoconducto para salir de sus casas?   

 

La vida sigue igual. Y todo esto, sí pasa en Chile ¿O acaso les extraña?