HUELE A PODRIDO

Al parecer el corrupto de Jadue pensaba escapar del país, para refugiarse en el paraíso venezolano al que tanta propaganda le hace. Lo impidió la PDI, lamentablemente.

 

Digo lamentablemente, ya que Jadue nos aporta muchísimo más fugado en Venezuela que procesado en Chile, donde sabemos no pisará la cárcel. Probablemente algunos amigos del Blog dirán que no, que ese $&%&$%& debe estar tras las rejas, y que yo ya estoy irremediablemente convertido en un comunista más, luego de mi rechazo a las matanzas de la OTAN e Israel, a lo que ahora se suma mi apoyo irrestricto a Jadue, mi socio particular antisemita. Pues no, no es así, no digan huevadas.

 

Como yo soy un pragmático comerciante que busca el respeto a la vida, la libertad y la propiedad de todo el mundo, incluido la de ucranianos, palestinos, rusos, iraníes, guatemaltecos y congoleños, entre otras muestras de diversidad planetaria, no me preocupa si Jadue entra en prisión o no lo hace (además en ningún caso irá a prisión). Lo que realmente me importa es como esta situación nos puede beneficiar. Que el populacho bárbaro se asombre con el delincuente fugado y protegido por el criminal de Maduro, hubiese sido algo para destapar botellas y tirar challa hacia el cielo.

 

Otro sinvergüenza es el exdiputado republicano Mauricio Ojeda, que está siendo investigado por una arista del caso Convenios. El fulano asegura que su hijo de tres años destruyó su teléfono celular. Hay que ser muy miserable para involucrar a un hijo en esto, una prueba más de que el PR debe redefinir su selección de candidatos, después de conocer a algunos de ellos.

 

Esto vale para todos los políticos. Siempre pregúntense lo siguiente ¿De que vivía este fulano antes de ser parlamentario, alcalde o lo que sea; cuanto ganaba y cuánto gana ahora? Ahí se darán cuanta de la voracidad con que actúan para pretenden mantenerse en su puesto a cualquier precio, antes de regresar a vivir como una anónima persona más, y con un sueldo normal.