CAMBIO CLIMÁTICO, EL PLAN PERFECTO

En los próximos días lloverá agua, mucha, y desde arriba hacia abajo, como toda la vida. Los agoreros del cambio climático y el fin mundo no aparecen a contrarrestar las malas noticias. Desde hace dos o tres años no los veo por ninguna parte. Ni a los capos, ni a los expertos, ni a los escribidores de papers, ni a los ambientalistas, ni a nadie ¿Dónde están los buenos? Desaparecieron.

 

El ambientalismo está repleto de patanes, golfos y sinvergüenzas. Y como el mundo se está acabando desde hace siglos y siglos y aun no se acaba, el negocio se ve auspicioso. Tiene futuro. Repliegue estratégico hasta nuevo aviso o nueva sequía. Los que no se acaban son los imbéciles que se creen lo que les digan, si lo que les dicen se transmite por televisión en horario de matinal, vermut y noche.

 

Recordemos que este asunto del cambio climático se inició, aunque ustedes no lo crean, como enfriamiento global. El enfriamiento al parecer era medio corneta, no funcionó, y como si nada, nos avisaron que el fin del mundo se produciría por el calentamiento global. La prensa colaboró con entusiasmo difundiendo el cambio copernicano.

 

Y claro, como el plan perfecto no existe, y entre enfriamientos y calentamientos la confusión era caballa, los políticos y expertos en mentir nos informaron que esto no podía continuar, que los políticos y expertos en mentir no podían estar pendientes si aquí llovía y allá salía el sol, por lo tanto, el nuevo mantra es el cambio climático, es decir, el plan perfecto lo abarca todo, y pase lo que pase, todo cuadra.

 

Incendios forestales: no son los conejos pirómanos, es el cambio climático. Socavones en Concón: no es la imbecilidad humana y la corrupción, es el cambio climático. Chocan dos trenes: no es que los sacos de weas se quedaron dormidos o iban leyendo LUN, es el cambio climático. Mean las gallinas: Cambio climático. No mean las gallinas: Antes meaban, por lo tanto, ya no mean por culpa del cambio climático. Y a quien no le parezca, es un negacionista, un fascista y un pobre analfabeto infeliz. Y no ponga leseras en Twitter porque lo echamos del trabajo, de la universidad y del barrio.

 

Y si no me cree asómese por la ventana y vea lo que pasa ¿Llueve o no llueve? ¡¡Ahhhh!!, llueve, ¿verdad? ¡Pero si se lo dije, desgraciado, es el cambio climático!

 

Zámpese tres sopaipillas y prenda la tele, vea las noticias, infeliz, para que se informe y culturice. Desgraciado negacionista de mierda.