EL SACRIFICIO DE MONSALVE

Monsalve se ha transformado en el chivo expiatorio, en el poseedor de todas las culpas, de todos los pecados del mundo, o al menos de todos los pecados del gobierno y sus partidos.

 

Los compañeros de la prensa seria colaboran entusiastas como bellacos a sueldo. Fíjense. Resulta que Monsalve está siendo linchado sin misericordia en la plaza pública por malgastar o robar el dinero de los llamados gastos reservados. No he visto, ni escuchado, ni leído hasta el momento, que los señores políticos y sus sicarios compañeros de la prensa seria formulen las dos preguntas que caen de cajón:

 

¿Cuál es la razón para que todos los ministros y quizá quienes además de ellos utilicen fondos reservados? ¿El Merluzo cuenta con fondos reservados? ¿Reservados por qué y para qué?

Y la otra incómoda pregunta que pasa colada luego de que el Cordero del Dios ha iniciado el proceso de degüello es: ¿Y qué tal si investigamos los fondos reservados de todos, todas y todes les compañeres del gobierne feminista?

 

Estas incomodas venalidades no las plantean quienes están en el gobierno ni quienes pretenden acceder a él. No sea cosa que el negocio se vaya a la cresta, los pillen robando a todas, todos y todes, y deban legislar a la rápida, tipo píldora del día después para legalizar el latrocinio masivo, tal como se hizo con los sobres repletos de billetes que cobraban en negro los ministros en los albores de la democracia.

 

Ocultar los desmanes y atentados en contra del país bien vale una víctima, en este caso, el Monsalve, supuesto violador y curagüilla ya amortizado por sus pares, hoy en día devenido en un enemigo del pueblo que es menester manosear, humillar y apedrear en la plaza pública, creando la cortina de humo ideal que permita ocultar el latrocinio y la depravación diseminada por toda la administración publica regentada por la piara de atorrantes resilientes, inclusivos, animalistas y feministas manoseadores de potos.

 

El linchamiento de Monsalve, oportunamente difundido a discreción por los medios de desinformación masiva, coincide con la machacona y vergonzante difusión de la verdad oficial sobre las acusaciones al Merluzo, que la prensa de todos los colores ha difundido en copy paste, utilizando el argumento emanado del comité creativo de palacio: La mujer que acusa a Boric está loca y las acusaciones no son creíbles. Para creíbles están las acusaciones contra Monsalve, el Cordero de Dios que quita los pecados del mundo al gobierno de atorrantes y su atorrante mayor.