GUERRA CIVIL CALLEJERA

Lo más interesante de la guerra civil al interior del PNL, consiste en que Espumita, que se ha convertido en una especie de proto dictador de facto del partido, amenaza a sus miembros díscolos con enviarlos al tribunal supremo, algo así como “acúsalo con tu mamá, Quico”, por manifestar su disconformidad con el reclutamiento de octubristas, extremistas de izquierda que hoy son miembros del PNL y candidatos al parlamento.

 

Recordemos que Espumita renuncia al PR, o lo echan, o lo instan a salir de él, o como haya sido el asunto, al tiempo que acusaba al partido y a su líder, JAK, de pretender imponer una nueva constitución que, según él, no coincidía con las ideas del partido, y que no se permitía la disidencia, o algo así..., es decir, que el que cambió fue le partido, y no él.

 

Escuché del mismo Espumita, en el video que nos mostró ayer Challenger, que el aspirante a dictadorzuelo decía, sin complejos, que quien no aceptara las cosas como son, se podía ir. Así, mas o menos, no se si literal, pero eso era en el fondo. Es decir, ¿Espumita se convirtió en JAK? Je…je…je… Conste que no digo que JAK sea así, digo que Espumita lo decía. Esto está muy entretenido.

 

Pero no es novedad, ya que como todos sabemos, o debiéramos saber de este prepotente candidato presidencial, Espumita ha mencionado muchas veces eso de “pasar cuentas”. Este tipejo ordinario siempre anda amenazando a diversas personas con “pasar cuentas”. Esa afición, hasta donde yo entiendo, la ejercitan los patos malos

 

¿Se imaginan a un presidente, con el poder que tiene, “pasando cuentas”? Sería una dictadura, obviamente. Pasar cuentas no es una costumbre muy democrática que digamos, y amenazar con eso menos aun, es como de cobardes. Recuerdo eso de “te voy a esperarte a la salida, jil culiao”… Es muy ordinario eso de esperar a alguien a la salida, el choro de verdad pega el combo altiro nomás.

 

Quien quiera ocupar su tiempo en ver la alocución completa del Espumita, y la reacción de ese tal Maximiliano Lobos, del cual tampoco me gustaría ser amigote, podrá apreciar el charquicán de contradicciones que espeta Espumita.

 

Esa vergüenza la suelen padecer quienes se venden como sabedores de todo, aunque en realidad no sepan casi nada de nada. Esto está muy entretenido, y yo puedo decir que…se los dije.