NO HABLES.

El coronel Villarroel y el coronel Krassnoff son harto giles. El primero será dado de baja, y al segundo, hasta el momento, solo se le seguirá el curso a su solicitud de retiro. La sacaron barata, hasta el momento… No es llegar y hablar en Chile, menos aún discutir la verdad oficial, aunque sea durante un partido de futbol ¿No ven cabros que los rojos se puede enojar y la ex derecha se puede defecar de miedo? Los dos para afuera.

En Chile no es llegar y hacer un homenaje, si es que esto fue un homenaje ¡Es que son funcionarios públicos! Claro, tal como Bachelet, la vez que homenajeó a Fidel Castro el día en que comenzó su viaje al infierno. No le importaron a la iñora los familiares de los asesinados por la dictadura cubana. En fin, casos como este de tipo de homenaje hay muchos, pero como son homenajes zurdos, todo vale.

Yo no sé qué hizo o no hizo el brigadier Krassnoff, y como se habrán dado cuenta, es muy raro que me refiera a este tipo de temas ya que no cuento con información alguna. No sé ni me interesa conocer detalles. Ahora bien, que Krassnoff esté preso gracias a “ficciones jurídicas”, acusado de “secuestro permanente”, “crímenes de lesa humanidad” y por ser “parte de la cúpula de la DINA” siendo un teniente de menos de 30 años, pues más parece una venganza, una señal para quienes decidan eventualmente interponerse en un futuro intento de instauración del comunismo en Chile. No parece justicia. Y ni hablar de la ley de amnistía que benefició a los de un lado y se niega ese derecho a los del otro lado.

¿Qué yo soy un fascista y todo lo demás? OK, digan lo que quieran, pero primero me explican la razón por la que la izquierda chilena le dio asilo al tío Erich y la tía Margoth, luego de haber dirigido el campo de concentración llamado eufemísticamente “República Democrática Alema”. Je…je…je… Y de ahí conversamos sobre derechos humanos, de los de aquí y de los de allá.