MAL DÍA.

Mal día para el presidente de derecha que cambió y su corte. Un miembro del Comando Jungla, no entendió que su comando es solo pa’la foto, y mató de un tiro en la cabeza a un joven reivindicador que estaba en pleno proceso reivindicativo. El primo arrepentido está con colitis.

Afortunadamente para el gobierno, un agricultor, cabreado por los constantes ataques reivindicativos, apuntó con un arma, aunque sin dispararla, a un grupo de reivindicadores. Eso es suficiente, por el momento, para empatar el partido, y colgarse del primer madero que encuentren para no terminar ahogado en este mar de dialéctica tramposa al que estamos sometidos todos hoy en día. 

Y como si esto no fuera un problemón, Farmacias Ahumada anunció el cierre de 50 tiendas y el despido nada menos que de 1.000 empleados. El legado de la Comandante Claudia, que con tanto ahínco pretende administrar Sebastián y su tropa, hace agua por todos lados. A este paso, ni los huesos de Frei Montalva salvarán a este gobiernito pichiruche.

No sé qué hacer para ayudar a Sebastián, me da tanta pena el pobre. Tal vez podría recomendarle una foto con Palma Salamanca bajo el cuadro de Allende, el mismo que utilizaba para estos menesteres su ex esclavo Gilpeter; o tomar desayuno en la casa de Daniela Vega para celebrar el día de la mujer. Lavín podría asesorarlo de mejor manera, la experiencia no tiene precio.

Mientras tanto Sebastián resuelve como puede hacer para que esta vez sí, de una buena vez, el legado funcione, el populacho bárbaro de clase media aspiracional qué no votó por él, sino que arrancó del fantasma de Chilezuela, pierde la paciencia ¿Cómo es eso, señor presidente, de que los sueldos no suben como la espuma, la deuda de la tarjeta aumenta sin parar y las vacaciones en Cancún ahora será en El Tabo? Mala la cosa ¿Acaso no fue usted a Harvard y sabe cómo hacerse millonario? ¡Eso es lo que queremos nosotros también!

Tal vez Sebastián podría acelerar el rebautizo del aeropuerto Pudahuel, mientras recita la Oda a Stalin. O declarar el día nacional del mote con huesillo, mientras se atraganta con un cuesco en un carrito del Paseo Ahumada. Eso sí, le advierto a su excelencia que evite los chistes, especialmente si están relacionados con alguna minoría vociferante, mire que las cosas no dan para tanto en estos días.