¿Y NUESTROS DERECHOS HUMANOS?

Hoy, todo el mundo se llena la boca con los derechos humanos. El INDH lleva la guaripola ¿Quién puede oponerse a respetar todos los derechos humanos de las personas? Pues nadie normal, a excepción de un comunista que defiende lo que sucede en Cuba, Venezuela y algunos otros paraísos terrenales.

La ONU tiene una larga lista de derechos humanos, sin embargo la extrema izquierda no respeta varios de ellos y nos pretende imponer una nueva constitución que con toda seguridad vulnerará otros. Los que sean necesarios vulnerar si es que la revolución así lo necesita. Solo vean lo que sucede en Venezuela.

El “consenso” más desopilante sobre los derechos humanos, y que durante estas “jornadas de reflexión” ha vuelto a relucir, consiste en que solo “agentes del estado” pueden atentar en contra de los derechos humanos. El INDH lo asegura. Aquí el tema no es solo quien muere, también quien mata, o golpea, o lo que sea.

El gobierno, por su parte, deja hacer lo que quiera a todo criminal, por miedo a que los acusen y luego procesen por cumplir con su deber de mantener el orden público, evitar atentados y proteger a la gente. Nos dejaron a nuestra suerte. 

Este criterio sobre los atentados a los derechos humanos, tiene como finalidad atar de manos a las policías y militares que combaten a grupos revolucionarios, terroristas y delictuales que atentan contra el mismo estado y/o las personas, si es que el terrorismo está fuera del estado, como en el reciente caso chileno. Y protege a milicias irregulares, como las venezolanas, y grupos terroristas afines a gobiernos, como el MIR durante la Unidad Popular. Es decir, estos gobiernos comunistas no necesariamente reprimen a la oposición haciendo uso de “agentes del estado”, sino de grupos particulares, como aquellos que el Informe Rettig definió eufemísticamente como “violencia política” (nadie fue). Y pasan colados. Es el plan perfecto, invocar los derechos humanos para poder vulnerarlos sin temor a respuestas.

Ya lo saben estimados amigos, prenderle fuego a una estación de metro, una vivienda, un hotel o un supermercado con gente dentro, no es un atentado en contra de los derechos humanos, si no lo hace un “agente del estado” vistiendo el uniforme de la institución. El INDH no se molesta en perseguir dichos actos reivindicativos en el “contexto de una protesta pacífica”, ya que la ley no lo faculta para eso. Para dictar esa ley no necesitaron cambiar la constitución, ahí no estaban con las manos atadas por Guzmán y cia. Je…je…je…

Bueno, la gallá tendrá que defenderse como pueda, por lo que estoy pensando en comprar un arma, total, no soy agente del estado, no atentaré en contra los derechos humanos del criminal y registraré el fierro de acuerdo a ley que tanto le gusta a la gente en Barbarilandia. Defensa propia y legal, debido a que la policía ya no nos defiende y la horda continúa quemando y saqueando a destajo. Igual no me gusta la idea, pero a este paso los gustos me los tendré que meter por buena parte.

Creo que se pueden tener dos por cabeza. Como aquí hay capos en este tema, les cuento que estuve mirando y me tincan dos: Una escopeta Remington Tac-14 DM, aunque no sé si será legal en Chile por el tamaño, y una pistola Sig Sauer P365 para meterla en el bolsillo ¿Qué me dicen? 

Aunque... igual preferiría no comprar un arma.