UN DIA MAS EN LA ARAUCANÍA.

Se ha armado un escando de Padre y Señor mío por el atentado a un equipo de TVN, que dejó tuerto a uno de sus funcionarios y herido a otro. No entiendo el asombro, considerando que este acto reivindicatorio sucedió -como suceden a diario este tipo de delitos- en la Araucanía, donde el manoseado pueblo mapuche reclama legítimamente sus derechos ancestrales. Esto es al menos lo que los medios de comunicación, como la misma TVN y otros, se han empeñado en difundir con singular éxito desde hace muchos años.

 

Situaciones como esta y otras aun mas graves, suceden a diario en la región, aunque el respetable público tiene pocas oportunidades de conocerlas a fondo, debido al desinterés de los medios de comunicación en difundir noticias que atentan contra su línea editorial, es decir, contra sus propios intereses, situación que ha sido denunciada en multitud de ocasiones por las víctimas de atentados, incendios, robos, extorsiones, amenazas, tomas, asesinatos y demás actos reivindicativos, quienes aseguran que los medios no los consideran a la hora de dar a conocer sus penurias. En resumen, las víctimas denuncian una evidente parcialidad de los medios de comunicación -como TVN, por ejemplo- en favor de los no-terroristas, que esta vez dejaron secuelas en algunos compañeros de la prensa que sufrieron el embate del fuego amigo.

 

Autoridades, políticos de ambos bandos y medios de comunicación, en lugar de lamentar un acto reivindicativo que en la región no pasa de ser cotidiano, y vociferar ridiculeces como que lamentan y condenan los hechos, además de interponer una nueva querella en contra de quienes resulten responsables, debieran utilizar su poder e influencia para terminar con el no-terrorismo que hasta el día de hoy sigue siendo apoyado, ocultado, minimizado y utilizado por ellos mismos, si es que les trae algún tipo de beneficio y coincide con su proyecto político.

 

Basta de hacer el payaso condenando crímenes que no tienen interés en resolver, y basta de ser cómplices de una situación que se agrava día a día. No necesitamos más declaraciones de solidaridad; necesitamos terminar con el terrorismo. Usted puede ser la próxima víctima, ¿o no?