CORTA CABEZAS MODERADOS

La grotesca y descarada propaganda con que los medios de desinformación masiva de los compañeros de la prensa seria occidentales se refieren a la repentina y curiosa caída del régimen sirio, que “botó la toalla” de un día para otro sin oponer resistencia alguna después de una década de cruenta guerra y millones de muertos y desplazados, no es de extrañar.

 

No es de extrañar, ya que Siria no es más que otro escenario de la guerra que se libra entre la OTAN y Rusia con muertos ajenos, esta vez con Rusia e Irán apoyando a Siria, y la OTAN y sus esbirros como Turquía e Israel apoyando a grupos islamistas radicales que crean, utilizan, arman y protegen sin pudor alguno.

 

¿Recuerdan que Bin Laden inicialmente era el bueno que combatía a los soviéticos y después fue el malo? Pues eso…, hoy, el barbón de turno, Abu Mohammed al-Golani, quien aparentemente dirige bajo la atenta mirada de sus amos de la CIA a los mismos yihadistas de siempre, ahora rebautizados con el nombre artístico de grupo islamista Hayat Tahrir al-Sham (HTS), es el islamista bueno, ya sin turbante, con la barba recortada y al parecer buenos modales con la prensa occidental.

 

Resulta que esta vez los oligofrénicos corta cabezas islámicos son corta cabezas moderados, a un paso de ser declarados resilientes, inclusivos, verdes y respetuosos del cambio climático por el pervertido occidente.

 

Para cualquier desapasionado y buen observador de la realidad mundial, esto pareciera ser el primer paso del acuerdo entre Trump y Putin para terminar con parte importante del reguero de matanzas que se montan en nombre de la democracia y la libertad y el negocio de unos pocos que, primero arman guerras y venden armas para destruir países y matar gentes, para luego hacer otro colosal negociado reconstruyendo o haciendo como que reconstruyen lo que destruyeron, mientras roban a manos llenas el dinero de los contribuyentes norteamericanos y europeos que subsidian la destrucción y la reconstrucción.

 

Siria será entregada a occidente, la que será repartida en al menos un trozo para Turquía que busca controlar a sangre y fuego a los kurdos, otro trozo para Israel y sus psicópatas dirigentes que sueñan con genocidios masivos para lograr la creación del “Gran Israel” que se supone iría desde el Nilo hasta el Éufrates, y lo que quede de Siria será un protectorado norteamericano que solo servirá para saquear pozos petroleros.

 

A cambio, Rusia se quedará al menos con la región ucraniana que ya controla sino un poco más, y lo restante será un protectorado de la OTAN que cumplirá con el mismo fin, el saqueo masivo del país, permitido por el criminal, corrupto, ladrón y liberticida de Zelenski, que envió a cientos de miles de ucranianos a una segura, inútil y descarnada muerte para servir a los amos que lo rebozaron con miles de millones de dólares que hizo multimillonarios a él y a su camarilla de socios criminales.

 

Por el momento al menos, el genocidio en Gaza continuará. Ni siquiera Trump puede enfrentar al masivo lobby israelita que controla parte importante de la política internacional de USA, su aliado y protector en el mayor y más descarado genocidio que se comete hoy en día en todo el mundo.