CUERPOS Y CUERPAS

Estimado Diosito. Te escribo desilusionado. Me contaron desde chico en el colegio de curas que tú eres el creador de todo lo que vemos y padecemos. Dime una cosa, ¿fue una broma de mal gusto? Con todo respeto a su figura: ¿Ese día andaba medio caramboleado, jefe? Seguramente el apuro por terminar el trabajo en una semana fue una mala decisión. El apresuramiento no es un buen consejero.

 

Dime una cosa Diosito, ¿era necesario crear a tanto loco? ¿Realmente fue una buena idea? Si fallaste con don Adán y doña Eva, ¿no era el momento de replantear el diseño? La idea original no fue muy certera, si una simple serpiente y el creativo cerebro de la dama pudieron liquidar todo de un manzanazo. Dime Diosito, ¿la estupidez humana es parte del libre albedrío? ¿No fue como mucho entregar tanta rienda suelta a la imaginación de cualquier aparecido?

 

¿Sabes Diosito que aquí en la Tierra andan unos tipos vestidos con falda que dicen ser tus representantes? Yo que tú bajo ahora mismo y me querello por suplantación de identidad. Digo yo nomás… En fin…

 

Fíjate Diosito que todos los días estamos siendo víctimas de la loca imaginación humana. Nada es como antes, nada es como tú lo pensaste. Dime una cosa Diosito, ¿realmente pensaste antes de actuar? ¿Cómo puede un simple mortal rediseñar tu magna obra? Yo no entiendo, ayúdame a entender. Te dejo un ejemplo de lo que te estoy explicando, y de ser posible, como decía mi abuela, “que baje Dios y lo vea”. No nos vendría mal que bajes a poner un poco de orden en el boliche y de paso dejas advertidos a unos cuantos y les explicas que no es llegar y hacer. Gracias por la atención: https://www.emol.com/noticias/Nacional/2022/01/14/1044024/proyecto-sistema-unico-tallas.html