martes, 3 de diciembre de 2024

A MATACABALLO

El grotesco espectáculo de los señores políticos no se detiene. El escándalo de la semana el siguiente: El congreso legisló que las Isapres pueden devolver a sus afiliados un dinero que sus afiliados no pidieron que les devuelvan, hasta en 156 cuotas, 13 años. https://www.biobiochile.cl/noticias/nacional/chile/2024/12/03/aumentan-presiones-al-gobierno-por-la-forma-en-que-isapres-devolveran-excedentes-hasta-en-156-cuotas.shtml

 

Esto ha permitido que los canales de desinformación masiva y demás escoria social, hayan montado un lucrativo escándalo entrevistando a gente que recibe tres o cuatro gambas mensuales de devolución del dinero que, según el imaginario popular “las Isapres nos robaron”.

 

Expliquemos el asunto: Los políticos colocan a operadores políticos en la Corte Suprema, y no solo ahí, sino en todos lados. Uno de esos operadores políticos fue el juez Sergio Muñoz, quien se encumbró como “Capo di tutti capi” de la tercera sala de dicha corte. El juez Muñoz se dedicó a legislar por su cuenta, tipo Dios todopoderoso, a vista y paciencia de todo el mundo mundial. Y nadie hizo nada para evitarlo, hasta que la sangre llegó al rio.

 

Este juez decidió hacer desaparecer a las Isapres de la faz de la tierra mediante el fallo judicial que todos conocemos, sin importarle las calamidades que desataría su decisión, o tal vez conociéndolas y por lo tanto buscándolas a propósito; decisión que consistió en arruinarlas mediante devoluciones colosales de dinero que la gente nunca pidió. Pues bien, los señores políticos que permitieron esto, debieron legislar para solucionar el problema, ante la inminente caída del sistema y la mortandad asociada a la falta de atención, entregando el ya conocido plazo de 13 años para hacerlo, o las Isapres quebrarían sin remedio en el caso que debieran devolver ese dinero al contado, mismo plazo que las Isapres tendrán para subir sigilosamente los planes con el apoyo de los mismos señores políticos que dejaron la cagada, y con ese dinero pagar la deuda (a mí ya me lo reajustaron)...

 

Además, los señores políticos, espantados por el accionar del juez Sergio Muñoz que ellos mismos colocaron en la Corte Suprema conociendo como pensaba, lo sacaron de un ala, pero no por sus actos, sino por el lío de información privilegiada con su hija, tambien jueza, que además fallaba a lo grande desde Italia.

 

Es decir, las frívolas decisiones de los señores políticos son remediadas tarde, mal y de manera torticera, como hacen siempre. Hoy todos se culpan unos a otros, ante la indignada mirada de gente que esperaba recibir “de un toque” un dinero que no pidieron, que no deben recibir, y que si calculamos por ejemplo 400 pesos por 156 meses nos da el “colosal” resultado de $ 62.400. De eso se trata todo esto y no hay más. Una revolución y una ruina nacional por 60 lucas que nadie pidió.

 

Estas cosas suceden en países regentados por gentuza que es colocada en su puesto por más gentuza que vota por ellos en periódicas fiestas de la democracia, conociendo previamente que sus grandes timoneles de mierda son unos atorrantes, unos corruptos, unos ineptos y unos ladrones, con el indisimulado deseo de que, con un poco de suerte, pueden beneficiarse de la repartija del botín obtenido mediante sus latrocinios. Y aunque así no fuese, al menos tendrán la satisfacción de arruinar a algún rico que, se supone, les roba lo que no les pueden robar ya que lo supuestamente robado nunca ha sido de su propiedad.